18 septiembre 2007

"El tren del cielo..."

Hola amigos:

Lo daría todo por vivir esta magnífica aventura y sin embargo sigo aferrado a una vida "facil", un trabajo, una hipoteca, una sociedad que me consume y en la que consumo como cualquiera de nosotros; he renunciado a mis sueños inacabados por que ya no estaba convencido poder lograrlos, he querido descansar y pensar más en los demas, cuando lo das todo y ves que el camino es demasiado tortuoso es hora de cambiar, al fin y al cabo estamos aquí para buscar nuestro camino de la felicidad, por eso os digo de verdad, venga amigos, adelante con vuestros sueños, intentarlos no ceséis en el empeño, pero también os digo que miréis a vuestro interior y os preguntéis si quereis seguir intentándolo, lo importante no es conseguirlo, lo importante es tener un objetivo, tratar de lograrlo con pasión y determinación, cuando llega un alto en el camino es momento de reflexionar, quizás las cosas han cambiado lo suficiente para plantearos una nueva dirección, y en eso consiste para mí la vida, en buscar mi siguiente pasión... quizas sea viajar por el mundo o cultivar bonsáis, que más da, sólo quiero vivir en paz conmigo mismo y con vosotros, menos mal que siempre tenemos alguien cerca para contarnos sus sueños cumplidos... como mi querido hermano David.

Oscar Lacarra.

Os dejo con una de sus preciosas aventuras en el tren del cielo.


El tren del cielo... LHASA-BEIJINGXI


Tibet ha sido siempre un territorio abandonado por sus circunstancias geográficas. La meseta tibetana, con una media de 4800 metros de altitud sobre el nivel del mar (el pico más alto de Europa, el Mont Blanc apenas supera esa altura) es una tierra árida e inhóspita donde sólo los tibetanos han osado a través de los siglos desafiar las leyes naturales para amansarla. Con la modernización del mundo las duras condiciones ambientales pasaron a un segundo plano, y la gran extensión del terreno (uno de los países mas grandes del mundo por si solo) sumado a su bajísima densidad demográfica fueron un caramelo demasiado dulce para las ambiciones colonialistas y expansionistas del gobierno comunista de Mao. En 1949 Tibet fue ocupado por el ejército chino.


Desde entonces los esfuerzos del gobierno hacia Tibet se han centrado en “acercar” de cualquier manera Tibet al resto de China facilitando de esta forma el flujo de inmigrantes hacia la meseta y su colonización. El proyecto más ambicioso en este sentido ha sido la construcción de una línea ferroviaria que uniese Lhasa con Golmud, y por consiguiente a todo el país. Este ambicioso proyecto fue abandonado y retomado en varias ocasiones, siendo considerado en su momento como inviable debido a las duras condiciones topográficas y también ambientales del Tibet.


Finalmente, aprovechando los avances tecnológicos del momento y con el estéril rechazo de un Dalai Lama en el exilio, la línea Lhasa – Golmud fue inaugurada en julio de 2006. El nuevo tren ostenta además varios records: atraviesa el paso ferroviario mas alto del mundo a 5072 metros de altitud (Paso de Tanggula), y el túnel ferroviario más alto del mundo a 4905 metros (Fenghuoshan). Para evitar los efectos del mal de altura en los pasajeros en el interior de los vagones de tren viene liberado oxígeno. Si las cosas empeoran, individualmente se pueden utilizar gratuitamente tubitos, como los que se encuentran en los hospitales, que se conectan a una fuente de oxígeno debajo de cada asiento.

Moralmente muy reprobable, pero desde el punto de vista paisajístico uno de los viajes más hermosos de tren que se pueden hacer en el mundo. Tiempo atrás cuando planeaba mi entrada en China a través de Tibet me decidí a viajar desde Lhasa hasta Xi’an para vivir todos estos paisajes a través de la ventanilla de un tren a más de 4000 metros de altura.

Decían, como sucede muy a menudo, que era casi imposible conseguir un billete con pocos días de antelación. Acompañado de mi amigo Kalin, búlgaro indomable, en menos de 15 minutos conseguimos en la estación nuestros billetes para viajar 2 días mas tarde. Bueno… quizá el truco fue que mis 36 horas de viaje hasta Xi’an, y las 46 de Kalin hasta Beijing, las viviríamos en un asiento y no en una litera. Pero lo importante era estar ahí.


Llegó el día y cuando ocupamos nuestros asientos conocimos a nuestros vecinos inseparables de viaje. Me llamó la atención sobre todo un grupo de unos 6 o 7 jóvenes tibetanos. Aquellos que en principio parecían humildes aldeanos en busca de fortuna se transformaron después en artistas del thangka contratados por alguno de los nuevos ricos pekineses. Fue fantástico compartir este viaje con ellos. Cuando llegue a Xi’an, el que parecía su líder bajo del tren para despedirme y dándome un abrazo me bendijo colgándome del cuello una de sus blancas katas. Ay….Tibetanos!

Apenas echado a andar el tren comenzamos a disfrutar de unos paisajes de ensueño. A pesar de la velocidad del tren (unos 160 kilómetros por hora) la sensación que tienes es de lentitud, pues el terreno es plano y siempre acompañado de grandes montañas y picos a lo lejos, que te impiden percibir esa celeridad. Como si se tratasen de postales mágicas que se van diluyendo poco a poco y son sustituidas por otras quizá más bellas, fuimos avanzando a través de las horas mientras le íbamos diciendo adiós al Tibet. Picos nevados, paisajes desérticos, verdes prados, graciosos yaks pastando libremente, grandes lagos turquesa se sucedieron poco a poco como en una lección de geología, hasta llegada la noche. Sin duda el Tibet nos brindó una despedida a la altura de las circunstancias.

MAS INFORMACION SOBRE EL FERROCARRIL EN EL SIGUIENTE ENLACE:

http://en.wikipedia.org/wiki/Qingzang_railway (EN INGLES)


NOTA: DEBIDO A LA DIFICULTAD DE DAVID, EN ESTOS ULTIMOS DIAS PARA PODER ENVIAR LAS FOTOS HABITUALES DEL VIAJE,ME HE TOMADO LA LIBERTAD PARA ILUSTRAR EL TEXTO DE INCLUIR IMAGENES TOMADAS DE INTERNET, SI ALGUIEN SE SIENTE AGRAVIADO POR SU UTILIZACION POR FAVOR COMUNIQUENOSLO PARA SU RETIRADA.

09 septiembre 2007

Shangri-La

Queridos amigos y amigas del Blog "El Universo conspira..."

Una vez más nos encontramos de nuevo para seguir informando, y compartiendo el gran viaje con todos vosotros. Cuando se presenta una dificultad es obvio que hay que intentar superarla, eso es lo que esta sucediendo ahora, desde China donde se encuentra David en estos momentos, debido a la censura gubernamental no se puede utilizar el Blogger, osea que esa libertad de que disponemos a diario a la que duras penas damos importancia por que sentimos un derecho inexcusable, no es tal en otras partes del mundo.

Hemos conspirado una vez más para que todo siga igual y el blog se pueda seguir publicando en parte tambien por necesidad, la necesidad de que sepáis donde se encuentra David, de que está bien, de que continua su sueño, y de lo más importante, que es uno de los hombres mas felices de La Tierra viviendo intensamente sus aventuras de las que aquí solo se vislumbra un esbozo, ya que esta haciendo lo que quiere hacer... conocer el mundo, y vivir intensamente cada día, cosa que todos deberiamos al menos intentar alguna vez en la vida.

Bueno, sin más que deciros, espero que disfrutéis del artículo y las fotos que son tan buenos como de costumbre. Esperando que los Chinos abran algun día su mente y su corazón, os deseo lo mejor de lo mejor y un rayo de luz en vuestros corazones.

Que la Energía os acompañe allí donde quiera que estéis.

Oscar Lacarra.

Sin mas os dejo con el relato enviado desde algun remoto lugar en un lejano pais.... donde alguien encontro su horizonte perdido.

Shangri-La

En 1933 un novelista britanico llamado James Hilton publicó una novela llamada "Horizontes perdidos"en la que se describe un lugar próspero y maravilloso, rodeado de montanas nevadas bajo un cielo azul y perfecto, apartado del mundo y abandonado por el tiempo, donde vive gente sencilla y de noble corazón.

James Hilton (9 de septiembre 1900- 20 de diciembre de 1954) escritor Britanico.

El lugar aparentemente ficticio se llamaba Shangri-La, y corresponde con la idea que tenemos del paraiso terrenal. Desde entonces aventureros, naturalistas y exploradores de todo el mundo atraídos por la belleza de los parajes descritos por Hilton en su libro intentaron descubrir la localizacion exacta de ese paraiso. Shangri-La se convirtió en mito. Yo tengo la suerte de haber estado allí. Yo he visto Shangri-La con mis propios ojos. Se llama Tibet.

Portada del libro de referencia y carteles publicitarios de la pelicula realizada con posterioridad en 1937

Es muy complicado, y triste a la vez, hablar de Tibet sin que salgan argumentos politicos de por medio. Pero hay que empezar de esta forma porque hoy en día un simple e inofensivo viajero independiente como yo no es libre de entrar en Tibet por su cuenta y riesgo. Las autoritarias autoridades chinas, valga la redundancia, prohíben todo tipo de entrada en Tibet desde Nepal de no ser a través de un tour organizado en grupo por una de las agencias gubernamentales chinas.
El precio que he tenido que pagar por este sueño dentro de otro sueño han sido 400 dolares americanos, unos 300 euros para que nos entendamos, por 7 noches y 8 dias de viaje en 4x4 desde Kathmandu hasta Lhasa, capital de Tibet, a través de la "carretera de la amistad". Ni siquiera estampan un sello en tu pasaporte. Tu visado, o mejor dicho permiso de entrada en Tibet, es un folio de papel con unas cuantas líneas en caracteres chinos, un par de firmas y algún sello.

* El permiso al que hace referencia David debe ser algo parecido a este documento que he encontrado en internet.



El viaje comenzo en Kathmandu, donde mis nuevos y numerosos companeros de aventura y yo tomamos un autobús con destino a Kodari, en la frontera con China. A partir de ahí, el resto del viaje lo hariamos en 4x4. Me sorprendió que eramos mayoria de españoles en un grupo de unas 25 personas, algo inaudito pero que es un fenomeno creciente allí por donde voy: hay españoles por casi todas las partes.


El primer día fue agotador y decepcionante. La carretera esta cortada por obras durante gran parte del día, por lo que tuvimos que esperar a que se hiciera de noche para poder proseguir nuestro viaje por un camino con unos baches enormes, llegando a nuestra primera parada en Nyalam ya de madrugada. Ese día lo unico que "saboreamos" de Tibet fueron los numerosos y cansinos controles de pasaporte y permisos chinos. Si a uno no le dicen donde se dirige podria pensar que está camino de una prision de alta seguridad. "¿Merecerá la pena tanto dinero y tanta molestia?", me preguntaba... La respuesta a esa pregunta llegó a las pocas horas de comenzar el segundo día.


Apenas nos fuimos adentrando más y más en Tibet empecé a disfrutar de unos paisajes de otro planeta. Grandes extensiones de terreno plano y desértico salpicadas por petachos fértiles y verdes donde se asientan alguna de las remotas aldeas tibetanas a mas de 4000metros de altura, rodeadas por todos los lados de "colinas" nevadas a más de 7000 u 8000 metros de altitud.


Siento la necesidad imperiosa dehacer parar el jeep cada 5 minutos para bajarme y poder sentir todo esto en paz y en silencio, pero a la vez no puedo olvidar que el gobierno chino me obliga a estar dentro de ese jeep y a viajar con otras 25 personas si quiero continuar allí. Una pena. Pero mientras tanto disfruto de todo lo que veo, siento y percibo tanto como puedo. Que es muchísimo. Jamas volví a dudar de la conveniencia o no de estar en Tibet.


A medida que fui gozando con los paisajes, los tibetanos fueron apareciendo para completar mi postal de Tibet. Personas amables, amistosas, risuenas, muy humildes y que transmiten la paz cada vez que posas la mirada en el negro de sus ojos. Con tan solo un "Tashi-delek!" (Hola!) te los tienes ganados. Primero te contestan y luego te regalan una sonrisa muy sincera que te obliga a replicarla. Nunca he sonreído tanto en ningun lugar como en Tibet. Ha sido caminar por las calles como si esperara que me estuvieran tirando fotos todo el rato.





Las aldeas tibetanas son preciosas. Casitas bajas, al máximo de un piso y planta baja, construídas en perfecta armonía con el entorno, de blancas paredes, ventanas rodeadas de un marco negro y con alguna línea horizontal roja. Estos colores tampoco son casuales y simbolizan virtudes del budismo, su preciada religión.



Es imposible hablar de Tibet sin hacer mención del budismo. Durante el viaje visitamos varios monasterios, entre ellos los monasterios de Sera y Drepung en Lhasa y Tashilumpo en Shigatse. Antes habitados por miles de monjes cada uno, ahora solo por cientos. Los monjes, y monjas tambien, son inevitables en este país. Entrar en cualquier monasterio gompa es una experiencia fascinante. Las sesiones de oracion, donde se reunen los monjes y cantan las escrituras sagradas te ponen la piel de gallina. En Sera cada tarde practican su "deporte" preferido, el debate, lanzandose energicas preguntas acompañadas de palmadas para discutir sobre asuntos de religión. Los devotos peregrinos estan por todas las partes, acompañados de sus rueditas de oración que giran sin parar y sus preciosos rosarios.



Lo mas bonito es ver a tantas personas, muchas muy ancianas, con sus vestidos tradicionales, mientras rezan y realizan las "koras" (rutas circulares alrededor de un lugar sagrado). Y mientras todo esto sucede, su lider espiritual, político y la persona mas amada del Tibet, el Dalai Lama, continua en Dharamsala (India) en el exilio.

El 14º y vigente Dalai Lama, Tenzin Gyatso (nacido en 1935).




El cuarto día llegamos a Lhasa, la capital. Al principio todo el encanto tibetano de las aldeas precedentes desaparece por completo.Todo el extrarradio y gran parte del centro de la capital está literalmente colonizado por la etnia dominante Han. O lo que es lo mismo, los chinos de toda la vida. Decepciona que toda esta cultura y forma de vida tan hermosa haya sido parasitada de esta manera, asfixiando seguramente la supervivencia y predominancia tibetana en su propia tierra. Lo que hace unos 50 años era una pequena y encantadora ciudad de unos 40.000 habitantes, todos tibetanos, se ha transformado en una moderna urbe china de 300.000 habitantes, donde no se sabe muy bien si los tibetanos son la etnia original o la minoritaria. Pero el mismo corazon de Lhasa todavía contiene la esencia mas pura de Tibet, en la plaza Jokhang donde se encuentra el templo mas sagrado para los tibetanos y en sus alrededores.



El maravilloso Palacio Potala.




El último reducto tibetano de Lhasa resiste todavía a la ocupación. Los mercados coloridos son un lugar fantástico donde pasear y recolectar cientos de sonrisas. Y por encimade todo... el mayor símbolo monumental del Tibet es el Palacio Potala, residencia de invierno, hasta que se vio obligado al exilio, del Dalai Lama. No hay palabras para describir su grandiosidad y belleza. Situado orgulloso en la cima de una pequena colina, el Potala reina sobre toda la ciudad y a su alrededor circulan los peregrinos, haciéndole reverencias hasta tocar con su frente sobre el suelo.


De noche impresiona todavia mas.

Tibet tampoco sería lo mismo para mi sin la bandana tibetana que me compré en Shigatse. Me venia haciendo falta un gorro para protegerme del sol a tanta altitud, y finalmente la encontré sin saber muy bien lo que representaba esta especie de bandana por la que pague 7 yuanes regateando. A partir del momento en el que comencé a usarla los tibetanos duplicaron sus sonrisas hacia mí, sobre todo las mujeres. La razon de tanta diversion es que esa bandana es usada por las mujeres en Tibet sobre todo en las aldeas. Cada vez que me veían con ella puesta, me sonreían, incluso reían, o me hacian un gesto de aprovacion con el pulgar hacia arriba. Yo me sentí tambien orgulloso de llevar algo encima que representase de alguna manera al Tibet. Y además es bien bonita! Incluso despues de atravesar el Tibet algunos inmigrantes la reconocen y me sonríen o me preguntan.

Para mí Tibet ha representado mi Shangri-La. Los paisajes y todo lo que he visto me ha impresionado, pero lo que más he disfrutado, lo que más me ha emocionado ha sido la gente. Nunca he conocido hasta ahora a gente tan amable, tan sonriente y que transmite tanta paz con sus miradas. Me he sentido disgustado por esta puerca ocupacion china, completamente fuera de lugar e innecesaria. Tanta policia, ejercito y demás. Soldados posando con su arma erguidos a las puertas de los edificios oficiales y cosas por el estilo. Todo esto en Tibet, donde no hay lugar en la Tierra, estoy convencido, que este mas lejano de estos protocolos o demostraciones de fuerza.

Sin ir mas lejos, el día que llegamos a Shigatse habia un festival (una fiesta!) en la plaza mayor de la ciudad. Para acceder a ella hacia falta una entrada. Los chinos para demostrar su virilidad y su brutal supremacía no emplearon ni vallas ni nada por el estilo para evitar la entrada libre de las personas, sino un cordón de policias antidisturbios, con sus cascos y sus porras. Pobres polícias ante tanto tibetano malsano y furibundo!! La reaccion de los tibetanos que se arremolinaban frente al cordon policial esperando que dieran las 11 de la noche para poder acceder a la fiesta libremente me dejó estupefacto: se reían, disfrutaban, gozaban, sonreian. No les importaba. No reaccionaron con violencia. Simplemente esperaron pacientemente, haciendo bromas si cabe, a que dieran las 11. De vez en cuando algun chaval o chavala haciéndose el sueco y de forma divertida intentaba pasar entre el metro o metro y medio de espacio entre dos policias. Cuando estos reaccionaban agarrando o empujándoles de vuelta la gente se reía. Fue gracioso y divertido de parte tibetana, y toda la demostración china grotesca.

China sin duda que ha aportado progreso e infraestructuras a Tibet, y quizas muchas otras cosas. Pero cabe preguntarse si todo este progreso era deseado por los tibetanos, profundamente tradicionales. Estoy seguro de que no, y mucho más seguro todavía si el precio que hay que pagar es la ocupacion, el exilio del Dalai y la sumisión al comunismo estalinista chino. Quiero daros un consejo importante: venid a Tibet cuanto antes para poder disfrutar de su esencia tibetana antes de que esta desaparezca por completo engullida por la colonizacion Han.



Destino China.

Ruta hacia China


Pinchar en las imágenes para ver la ruta.

El itinerario es aproximado ya que es dificil precisar las ubicaciones exactas por la diferencia de nombres entre diferentes culturas.

Informaros de que son unos 3000 km.