09 septiembre 2007

Shangri-La

Queridos amigos y amigas del Blog "El Universo conspira..."

Una vez más nos encontramos de nuevo para seguir informando, y compartiendo el gran viaje con todos vosotros. Cuando se presenta una dificultad es obvio que hay que intentar superarla, eso es lo que esta sucediendo ahora, desde China donde se encuentra David en estos momentos, debido a la censura gubernamental no se puede utilizar el Blogger, osea que esa libertad de que disponemos a diario a la que duras penas damos importancia por que sentimos un derecho inexcusable, no es tal en otras partes del mundo.

Hemos conspirado una vez más para que todo siga igual y el blog se pueda seguir publicando en parte tambien por necesidad, la necesidad de que sepáis donde se encuentra David, de que está bien, de que continua su sueño, y de lo más importante, que es uno de los hombres mas felices de La Tierra viviendo intensamente sus aventuras de las que aquí solo se vislumbra un esbozo, ya que esta haciendo lo que quiere hacer... conocer el mundo, y vivir intensamente cada día, cosa que todos deberiamos al menos intentar alguna vez en la vida.

Bueno, sin más que deciros, espero que disfrutéis del artículo y las fotos que son tan buenos como de costumbre. Esperando que los Chinos abran algun día su mente y su corazón, os deseo lo mejor de lo mejor y un rayo de luz en vuestros corazones.

Que la Energía os acompañe allí donde quiera que estéis.

Oscar Lacarra.

Sin mas os dejo con el relato enviado desde algun remoto lugar en un lejano pais.... donde alguien encontro su horizonte perdido.

Shangri-La

En 1933 un novelista britanico llamado James Hilton publicó una novela llamada "Horizontes perdidos"en la que se describe un lugar próspero y maravilloso, rodeado de montanas nevadas bajo un cielo azul y perfecto, apartado del mundo y abandonado por el tiempo, donde vive gente sencilla y de noble corazón.

James Hilton (9 de septiembre 1900- 20 de diciembre de 1954) escritor Britanico.

El lugar aparentemente ficticio se llamaba Shangri-La, y corresponde con la idea que tenemos del paraiso terrenal. Desde entonces aventureros, naturalistas y exploradores de todo el mundo atraídos por la belleza de los parajes descritos por Hilton en su libro intentaron descubrir la localizacion exacta de ese paraiso. Shangri-La se convirtió en mito. Yo tengo la suerte de haber estado allí. Yo he visto Shangri-La con mis propios ojos. Se llama Tibet.

Portada del libro de referencia y carteles publicitarios de la pelicula realizada con posterioridad en 1937

Es muy complicado, y triste a la vez, hablar de Tibet sin que salgan argumentos politicos de por medio. Pero hay que empezar de esta forma porque hoy en día un simple e inofensivo viajero independiente como yo no es libre de entrar en Tibet por su cuenta y riesgo. Las autoritarias autoridades chinas, valga la redundancia, prohíben todo tipo de entrada en Tibet desde Nepal de no ser a través de un tour organizado en grupo por una de las agencias gubernamentales chinas.
El precio que he tenido que pagar por este sueño dentro de otro sueño han sido 400 dolares americanos, unos 300 euros para que nos entendamos, por 7 noches y 8 dias de viaje en 4x4 desde Kathmandu hasta Lhasa, capital de Tibet, a través de la "carretera de la amistad". Ni siquiera estampan un sello en tu pasaporte. Tu visado, o mejor dicho permiso de entrada en Tibet, es un folio de papel con unas cuantas líneas en caracteres chinos, un par de firmas y algún sello.

* El permiso al que hace referencia David debe ser algo parecido a este documento que he encontrado en internet.



El viaje comenzo en Kathmandu, donde mis nuevos y numerosos companeros de aventura y yo tomamos un autobús con destino a Kodari, en la frontera con China. A partir de ahí, el resto del viaje lo hariamos en 4x4. Me sorprendió que eramos mayoria de españoles en un grupo de unas 25 personas, algo inaudito pero que es un fenomeno creciente allí por donde voy: hay españoles por casi todas las partes.


El primer día fue agotador y decepcionante. La carretera esta cortada por obras durante gran parte del día, por lo que tuvimos que esperar a que se hiciera de noche para poder proseguir nuestro viaje por un camino con unos baches enormes, llegando a nuestra primera parada en Nyalam ya de madrugada. Ese día lo unico que "saboreamos" de Tibet fueron los numerosos y cansinos controles de pasaporte y permisos chinos. Si a uno no le dicen donde se dirige podria pensar que está camino de una prision de alta seguridad. "¿Merecerá la pena tanto dinero y tanta molestia?", me preguntaba... La respuesta a esa pregunta llegó a las pocas horas de comenzar el segundo día.


Apenas nos fuimos adentrando más y más en Tibet empecé a disfrutar de unos paisajes de otro planeta. Grandes extensiones de terreno plano y desértico salpicadas por petachos fértiles y verdes donde se asientan alguna de las remotas aldeas tibetanas a mas de 4000metros de altura, rodeadas por todos los lados de "colinas" nevadas a más de 7000 u 8000 metros de altitud.


Siento la necesidad imperiosa dehacer parar el jeep cada 5 minutos para bajarme y poder sentir todo esto en paz y en silencio, pero a la vez no puedo olvidar que el gobierno chino me obliga a estar dentro de ese jeep y a viajar con otras 25 personas si quiero continuar allí. Una pena. Pero mientras tanto disfruto de todo lo que veo, siento y percibo tanto como puedo. Que es muchísimo. Jamas volví a dudar de la conveniencia o no de estar en Tibet.


A medida que fui gozando con los paisajes, los tibetanos fueron apareciendo para completar mi postal de Tibet. Personas amables, amistosas, risuenas, muy humildes y que transmiten la paz cada vez que posas la mirada en el negro de sus ojos. Con tan solo un "Tashi-delek!" (Hola!) te los tienes ganados. Primero te contestan y luego te regalan una sonrisa muy sincera que te obliga a replicarla. Nunca he sonreído tanto en ningun lugar como en Tibet. Ha sido caminar por las calles como si esperara que me estuvieran tirando fotos todo el rato.





Las aldeas tibetanas son preciosas. Casitas bajas, al máximo de un piso y planta baja, construídas en perfecta armonía con el entorno, de blancas paredes, ventanas rodeadas de un marco negro y con alguna línea horizontal roja. Estos colores tampoco son casuales y simbolizan virtudes del budismo, su preciada religión.



Es imposible hablar de Tibet sin hacer mención del budismo. Durante el viaje visitamos varios monasterios, entre ellos los monasterios de Sera y Drepung en Lhasa y Tashilumpo en Shigatse. Antes habitados por miles de monjes cada uno, ahora solo por cientos. Los monjes, y monjas tambien, son inevitables en este país. Entrar en cualquier monasterio gompa es una experiencia fascinante. Las sesiones de oracion, donde se reunen los monjes y cantan las escrituras sagradas te ponen la piel de gallina. En Sera cada tarde practican su "deporte" preferido, el debate, lanzandose energicas preguntas acompañadas de palmadas para discutir sobre asuntos de religión. Los devotos peregrinos estan por todas las partes, acompañados de sus rueditas de oración que giran sin parar y sus preciosos rosarios.



Lo mas bonito es ver a tantas personas, muchas muy ancianas, con sus vestidos tradicionales, mientras rezan y realizan las "koras" (rutas circulares alrededor de un lugar sagrado). Y mientras todo esto sucede, su lider espiritual, político y la persona mas amada del Tibet, el Dalai Lama, continua en Dharamsala (India) en el exilio.

El 14º y vigente Dalai Lama, Tenzin Gyatso (nacido en 1935).




El cuarto día llegamos a Lhasa, la capital. Al principio todo el encanto tibetano de las aldeas precedentes desaparece por completo.Todo el extrarradio y gran parte del centro de la capital está literalmente colonizado por la etnia dominante Han. O lo que es lo mismo, los chinos de toda la vida. Decepciona que toda esta cultura y forma de vida tan hermosa haya sido parasitada de esta manera, asfixiando seguramente la supervivencia y predominancia tibetana en su propia tierra. Lo que hace unos 50 años era una pequena y encantadora ciudad de unos 40.000 habitantes, todos tibetanos, se ha transformado en una moderna urbe china de 300.000 habitantes, donde no se sabe muy bien si los tibetanos son la etnia original o la minoritaria. Pero el mismo corazon de Lhasa todavía contiene la esencia mas pura de Tibet, en la plaza Jokhang donde se encuentra el templo mas sagrado para los tibetanos y en sus alrededores.



El maravilloso Palacio Potala.




El último reducto tibetano de Lhasa resiste todavía a la ocupación. Los mercados coloridos son un lugar fantástico donde pasear y recolectar cientos de sonrisas. Y por encimade todo... el mayor símbolo monumental del Tibet es el Palacio Potala, residencia de invierno, hasta que se vio obligado al exilio, del Dalai Lama. No hay palabras para describir su grandiosidad y belleza. Situado orgulloso en la cima de una pequena colina, el Potala reina sobre toda la ciudad y a su alrededor circulan los peregrinos, haciéndole reverencias hasta tocar con su frente sobre el suelo.


De noche impresiona todavia mas.

Tibet tampoco sería lo mismo para mi sin la bandana tibetana que me compré en Shigatse. Me venia haciendo falta un gorro para protegerme del sol a tanta altitud, y finalmente la encontré sin saber muy bien lo que representaba esta especie de bandana por la que pague 7 yuanes regateando. A partir del momento en el que comencé a usarla los tibetanos duplicaron sus sonrisas hacia mí, sobre todo las mujeres. La razon de tanta diversion es que esa bandana es usada por las mujeres en Tibet sobre todo en las aldeas. Cada vez que me veían con ella puesta, me sonreían, incluso reían, o me hacian un gesto de aprovacion con el pulgar hacia arriba. Yo me sentí tambien orgulloso de llevar algo encima que representase de alguna manera al Tibet. Y además es bien bonita! Incluso despues de atravesar el Tibet algunos inmigrantes la reconocen y me sonríen o me preguntan.

Para mí Tibet ha representado mi Shangri-La. Los paisajes y todo lo que he visto me ha impresionado, pero lo que más he disfrutado, lo que más me ha emocionado ha sido la gente. Nunca he conocido hasta ahora a gente tan amable, tan sonriente y que transmite tanta paz con sus miradas. Me he sentido disgustado por esta puerca ocupacion china, completamente fuera de lugar e innecesaria. Tanta policia, ejercito y demás. Soldados posando con su arma erguidos a las puertas de los edificios oficiales y cosas por el estilo. Todo esto en Tibet, donde no hay lugar en la Tierra, estoy convencido, que este mas lejano de estos protocolos o demostraciones de fuerza.

Sin ir mas lejos, el día que llegamos a Shigatse habia un festival (una fiesta!) en la plaza mayor de la ciudad. Para acceder a ella hacia falta una entrada. Los chinos para demostrar su virilidad y su brutal supremacía no emplearon ni vallas ni nada por el estilo para evitar la entrada libre de las personas, sino un cordón de policias antidisturbios, con sus cascos y sus porras. Pobres polícias ante tanto tibetano malsano y furibundo!! La reaccion de los tibetanos que se arremolinaban frente al cordon policial esperando que dieran las 11 de la noche para poder acceder a la fiesta libremente me dejó estupefacto: se reían, disfrutaban, gozaban, sonreian. No les importaba. No reaccionaron con violencia. Simplemente esperaron pacientemente, haciendo bromas si cabe, a que dieran las 11. De vez en cuando algun chaval o chavala haciéndose el sueco y de forma divertida intentaba pasar entre el metro o metro y medio de espacio entre dos policias. Cuando estos reaccionaban agarrando o empujándoles de vuelta la gente se reía. Fue gracioso y divertido de parte tibetana, y toda la demostración china grotesca.

China sin duda que ha aportado progreso e infraestructuras a Tibet, y quizas muchas otras cosas. Pero cabe preguntarse si todo este progreso era deseado por los tibetanos, profundamente tradicionales. Estoy seguro de que no, y mucho más seguro todavía si el precio que hay que pagar es la ocupacion, el exilio del Dalai y la sumisión al comunismo estalinista chino. Quiero daros un consejo importante: venid a Tibet cuanto antes para poder disfrutar de su esencia tibetana antes de que esta desaparezca por completo engullida por la colonizacion Han.



Destino China.

Ruta hacia China


Pinchar en las imágenes para ver la ruta.

El itinerario es aproximado ya que es dificil precisar las ubicaciones exactas por la diferencia de nombres entre diferentes culturas.

Informaros de que son unos 3000 km.

5 comentarios:

Anónimo dijo...

HOLA! Oskar queria darte las gracias x publicar este articulo, se q Dave no puede ingresar, me lo encontre hace un par de dias en MSN y me habia dicho q te mandaba las cosas a vos.
GRACIAS x regalarnos esto, y darle una mano a Dave en tenernos al tanto de todo.
saludos a toda la flia
un beso,
jessy

Unknown dijo...

Hola,

Una pena que no exista esa libertad, de publicar en un blog y demas libertades, pero bueno son otra cultura, otro tipo de vida.

Espectacular el Tibet y el ambiente que hay ahi, los monejes, la religion, todo lo que envuelve ese lugar.

Pero lo que mas me gusto es saber que Dave es el hombre mas feliz del mundo, lo sabia pero siempre es bueno leerlo :-D

Saludos Dave y disfrutalo todo lo que puedas.

Anónimo dijo...

Hola Dave!

Hace mucho que no pasaba por aquí!

Me alegra saber que estás bien, que lo estás pasando genial!

Las fotos son preciosas por cierto!!

Un abrazo crack!!

Anónimo dijo...

Hola Jessy, un abrazo, gracias a ti por todo, intentare seguir publicando lo que me vaya enviando Dave, aunque se que es un poco mas complicado mientras permanezca en China, la ilusion no se pierde.
Este es el ultimo mensaje que me ha enviado... "hoy estuve en Hua Shan! Unas montanas muy bonitas, seguro que te da para investigar! Esta noche, dentro de un par de horas tengo tren a
Pingyao donde pasar dos dias o tres. Ya os contare! :)"

Un saludo y hasta pronto.

Oskar

Unknown dijo...

Gracias por tenernos al tanto Oskar ;-)